Todo depende del cristal con que se mira, t o d o d e p e n d e d e l c r i s t a l c o n q u e s e m i r a.
Yo no soy nadie más que alguien que acaba de pasarse a este lado del cristal, donde todo está en zoom y la vida es más cruel, donde el color rosa es una ilusión más y llorar ya no significa nada más que una pérdida de tiempo.
Soy una conciencia más, una recién nacida aprendiendo a abrir mis ojos con cuidado de que nadie me los saque. Deje de jugar con mis barbies, deje de aparentar que eso es todo lo que tenía que saber de la vida, deje de vestirlas y cepillarles el cabello y arreglarles una vida feliz, común y corriente, con su Ken al lado y todo. A cambio, aprendí a cambiarme y cepillar mi cabello y a diario debo corregir mis errores y arreglarme la vida, deje de vivir en mi mundo, para vivir el otro lado del espejo, del lado del espejo en el que la vida, en general, es más rápida y efímera. Todos tienen prisa y jamás tienen un segundo libre para sentarse y admirar el paisaje que tienen enfrente, viven en su jungla de concreto, con sus jaulas llenas de sus reservas preferidas: cigarros, diet coke y una computadora sin la cual se vuelven completa e innecesariamente ineptos.
Es verdad, soy nueva e inexperta y tal vez mi opinión no valga ni le interese a nadie, pero prefiero mil veces pensar en todo esto, equivocarme y aprender en el camino, que optar por el lenguaje silencioso que muchos otros deciden tomar.
No tengo que gritar ni amenazar para alzar mi voz, no tengo que golpear ni emplear la fuerza para luchar por mis ideales, mi solución (sólo la mía) es incluso más fácil, pacifismo total con esperanza arrolladora y una sed insaciable de un alma totalmente joven, nueva y refrescante.
No se parece en nada a un lenguaje acallado por nadie, no es que me siente a esperar a que alguien me pregunte lo que quiero, es simplemente expresar mis dudas, mis miedos, mis comentarios, sin tapujos.
Sólo soy una persona, esperando sin prisa, que alguien un día se siente y lea lo que tengo que decirle, sin muchas expectativas, pero si con mucha esperanza de que algún día, alguien se interesara y decidirá escribirme un poco también.
Yo no soy nadie más que alguien que acaba de pasarse a este lado del cristal, donde todo está en zoom y la vida es más cruel, donde el color rosa es una ilusión más y llorar ya no significa nada más que una pérdida de tiempo.
Soy una conciencia más, una recién nacida aprendiendo a abrir mis ojos con cuidado de que nadie me los saque. Deje de jugar con mis barbies, deje de aparentar que eso es todo lo que tenía que saber de la vida, deje de vestirlas y cepillarles el cabello y arreglarles una vida feliz, común y corriente, con su Ken al lado y todo. A cambio, aprendí a cambiarme y cepillar mi cabello y a diario debo corregir mis errores y arreglarme la vida, deje de vivir en mi mundo, para vivir el otro lado del espejo, del lado del espejo en el que la vida, en general, es más rápida y efímera. Todos tienen prisa y jamás tienen un segundo libre para sentarse y admirar el paisaje que tienen enfrente, viven en su jungla de concreto, con sus jaulas llenas de sus reservas preferidas: cigarros, diet coke y una computadora sin la cual se vuelven completa e innecesariamente ineptos.
Es verdad, soy nueva e inexperta y tal vez mi opinión no valga ni le interese a nadie, pero prefiero mil veces pensar en todo esto, equivocarme y aprender en el camino, que optar por el lenguaje silencioso que muchos otros deciden tomar.
No tengo que gritar ni amenazar para alzar mi voz, no tengo que golpear ni emplear la fuerza para luchar por mis ideales, mi solución (sólo la mía) es incluso más fácil, pacifismo total con esperanza arrolladora y una sed insaciable de un alma totalmente joven, nueva y refrescante.
No se parece en nada a un lenguaje acallado por nadie, no es que me siente a esperar a que alguien me pregunte lo que quiero, es simplemente expresar mis dudas, mis miedos, mis comentarios, sin tapujos.
Sólo soy una persona, esperando sin prisa, que alguien un día se siente y lea lo que tengo que decirle, sin muchas expectativas, pero si con mucha esperanza de que algún día, alguien se interesara y decidirá escribirme un poco también.
tu discurso es coherente, aunque deja espacio para el debate, hiciste una buena reseña de lo que eres, ya que somos lo que pensamos, me parece interesante, gracias por seguir el blog y espero que puedas comentar alguna publicacion. odulas nU
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